El Síndrome de Ovario Poliquístico (SOP) es una descompensación hormonal que como consecuencia provoca diferentes signos y síntomas en la salud de la mujer. Principalmente se generan quistes en los ovarios producidos por óvulos que no han sido liberados. Debido a ello, las mujeres que sufren SOP tienen síntomas como periodos menstruales muy irregulares, exceso de vello corporal y facial, acné o sobrepeso.
Según la última clasificación, establecida en el año 2006, debemos encontrar tres criterios clínicos para su diagnóstico: –hiperandrogenismo clínico y/o bioquímico (presencia excesiva de hormonas “masculinas” como la testosterona), –disfunción ovárica (disminución o anulación de la ovulación) y –exclusión de otros desórdenes derivados del exceso de andrógenos y desórdenes de la ovulación.
Por otro lado, al sufrir el cuerpo esta descompensación en el periodo, existe una mayor dificultad para lograr el embarazo.
Se ha demostrado que la presencia de insulina en sangre crea una mayor producción de testosterona a expensas de una reducción de estradiol con lo que puede tener una relación directa con la presencia del síndrome de ovario poliquístico.
¿Existe tratamiento?
A pesar de que el tratamiento establecido por la sociedad científica desde hace muchos años se basa en la administración de las conocidas “píldoras anticonceptivas”, lo cierto es que no tiene una cura “farmacológica” conocida. Aun así los síntomas se pueden paliar y aliviar los síntomas con un cambio de los hábitos y estilo de vida, sobretodo a la regulación y mejora de la sensibilidad a la insulina, que pueden llevar a obtener la regulación del ciclo menstrual y normalización hormonal que permita la liberación del óvulo en el periodo mensual establecido como normal.
Si a pesar de eso y tras haber aplicado los cambios en el estilo de vida persisten los síntomas del SOP, se puede realizar un tratamiento con hormonas anticonceptivas entre 3 y 6 meses, siempre que el profesional sanitario de referencia así lo determine.
¿Qué acciones podemos llevar a cabo para ayudarnos a estar mejor?
Ejercicio:
Dedicar a diario tiempo a tu cuerpo y a ti, con 30 minutos es suficiente. Recomendamos ejercicios como: fitness, caminar rápido, yoga o natación. Aunque al principio sea difícil, poco a poco te sentirás mejor y costará menos.
Alimentación:
Es muy importante tener un equilibrio en la alimentación, ésta ha de ser variada (frutas, verduras, cereales) y el contenido de fibra ha de ser elevado. Hay que eliminar por completo las grasas saturadas, azúcares añadidos y preferiblemente el gluten. Y sobretodo beber 1.5 litros de agua al día.
Sobrepeso:
Si el I.M.C. (índice de masa corporal) es superior a 25 es recomendable perder peso, de esta manera se regulará más fácilmente.
Estrés:
Es imprescindible eliminar el estrés, aunque sea complicado, ya que el SOP exige una vida tranquila. Sobretodo hay que intentar evitar el estrés psicosocial.
Alcohol y tabaco:
Hay que evitarlos, así que simplemente fuera. Desde el centro de salud o la farmacia pueden ayudarte, aconsejarte y acompañarte en el seguimiento de la deshabituación.
Inositol :
Tomar algún suplemento natural con inositol y vitaminas te ayudará a la regulación de los ciclos.
Tomando estas medidas, empezarás a sentirte mejor con el paso del tiempo.
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